Bienvenidos

Presento este blog con gran ilusión. Y alegría. No sé si servirán para algo los apuntes que yo pueda escribir aquí cada cierto tiempo. Reflexiones, poemas, escorzos de vida, fe de lecturas, noticias de amigos... No pretende ser un desahogo, más bien un diálogo.


jueves 27 de marzo de 2008

De vuelta a casa


Desde el coche exclamas: ¡mira!
Y se viste de flores la mirada.
Violetas, para más señas. Y esas otras
amarillas.
El cielo no siempre está arriba.
Como ahora.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde luego que manera de tan magnifica de hacer ver y sentir.

Anónimo dijo...

Gracias, Guillermo. Qué hermosura: me has hecho recordar a mi bella madrecita (+) recibiéndonos cuando volvíamos de vacaciones a la casa. Son pocas palabras, pero dicen tanto... Bendicionesa tí y a tu familia.

Anónimo dijo...

Lo malo no es que el cielo no esté,además,siempre arriba,que debería.Lo malo es que con demasiada frecuencia desaparece o peor aún,nos da la espalda.
¡Y si sólo fuera eso!.
A veces se encapricha contigo-vaya suerte-y te pone pruebas.
Y te dice:no te rompas,no estás solo,tu puedes.
Pero no es verdad,sigues solo y no hay flores, ni cielo.

Anónimo dijo...

Felicitaciones y agradecimientos.
Quedad con Dios.

Anónimo dijo...

Me gustó más,mucho más el de ayer.

Anónimo dijo...

Este poema me ha dejado desarmada. Algo tan delicado que me atrevo a escribirle para darle las gracias.